Los persojanes de la serie de Inuyasha le pertenesen a Rumiko Takahashi... yo solo los tome prestaditos vaya xD...
“Atrapados en una tormenta de nieve”
Por Eiko007
Un mounstro les ataco a media nevada, Inuyasha y Kagome se separaron de Miroku y Sango, Inuyasha trato de llevar a Kagome lejos de el peligro y a un lugar calido ya que estaba realmente frío y ella no iba a soportar con esa falda en medio de la nieve y todo el frío con que el se estaba congelando con su haori ya no digamos la pobre de Kagome…
El corrió a través de la nieve pero a ella solo le dio mas frío y comenzó a temblar en su espalda el se detuvo…
Inuyasha: “Kagome que hacemos se esta poniendo mas frío…”
El viento soplaba con mayor intensidad el ya no sabia que hacer con Kagome…
Kagome: “Busquemos una cabaña o algo así…”
Inuyasha: “Puedes caminar o quieres que sigamos como íbamos?”
Kagome: “Caminar porque corriendo solo me da mas frío…”
Ellos comenzaron a caminar con lentitud, Inuyasha le dio su kosode superior rojo a Kagome pero aun así estaba demasiado frío Inuyasha se congelaba también…
Kagome ya no pudo mas y se acerco a Inuyasha y lo abrazo por la cintura deslizando su brazo izquierdo en el, el casi de inmediato coloco su mano derecha en su hombro y la jalo mas hacia el, continuaron caminando hasta que ella se callo sus pies se sumergían en la nieve y no se fijo cayendo al frío suelo, Inuyasha no la pudo atrapar antes de caer al suelo, el frío hacia mas lentos sus movimientos, el la recogió de entre la nieve y la cargo en su espalda, ella le abrazaba con fuerza temblaba, ella era muy sincera respecto a sus sentimientos por Inuyasha pero no iba a decirle o actuar de una manera cariñosa cuando lo que el buscaba era alejarse de ella o simplemente insultarla como siempre ya había pasado mucho tiempo desde que no había visto a Kikyo que fue cuando le prometió ir con ella al infierno y tomo la decisión de su vida permaneciendo al lado de su amado Inuyasha, el cambio un poco a la manera en como la trataba, pero no fue tan drástico el cambio, con el tiempo le había venido siendo cada vez mas dulce literalmente el estaba siendo simplemente mas paciente pero para ella eso significaba mucho, ahora se congelaba y necesitaba una gran frazada y un chocolate para calmar el frío aunque esa parte profunda de su mente le hablo pensando en lago diferente… ‘O a Inuyasha haciéndote el amor, su piel desnuda y caliente rozando con la tuya… sudando’ ‘Cállate no digas eso…’ Ella se sonrojo solamente de pensarlo… Los pensamientos de Inuyasha no eran muy diferentes…
Inuyasha: ‘Ella esta temblando mas… no puedo permitir que se enferme mucho menos que valla a morir de frío… debemos encontrar una cabaña prono o una cueva no importa… con tal de que nos saque de este frío ambiente…’ ‘Cueva o cabaña no importa donde te gustaría mas hacerle el amor?’ ‘Pero que dices! Porque estas en mi cabeza’ ‘jaja soy esa parte de ti que muchas veces sale a la luz eres un idiota la chica te quiere porque no la calientas se te va a morir… jiji’ ‘No digas eso ni de broma…’ ‘Si ella llegan a ponerse con sus labios azules no tendrás mas opción… esa es una manera muy rápida de calentar sus cuerpos jajaja’ ‘Ya cállate…’ Entonces Kagome pensó en lo que la parte perversa de su mente le dijo… su olor cambio ‘mmm… que rico huele sabes que quiere decir eso…’ ‘Ya cállate apártate de mi mente…’
Inuyasha: “Aguanta Kagome ya llegaremos…”
Kagome: “Si… … Inuyasha…”
Inuyasha: “Que sucede?”
Kagome: “Y si no encontramos tal lugar… Tengo muchísimo frío… Tus pies están bien?”
Inuyasha: “Tranquila vamos a encontrar algún lugar y por mi no te preocupes yo soy un Hanyou…”
Ellos continuaron caminando y encontraron un río, Inuyasha brinco para pasarlo de una vez pero al llegar al otro extremo la piedra en la que callo no estaba bien puesta y se callo al río junto con ellos, Inuyasha nado como pudo y salio a la superficie en busca de Kagome, no la encontró se afligió y bajo el agua abrió los ojos encontrándola desmallada en le fondo del río y siendo arrastrada por la corriente, el nado como pudo porque el agua estaba casi congelada habían trocitos de hielo flotando arriba y en medio de el río, le costaba mucho trabajo moverse por la temperatura pero se esforzó y bajo hasta el fondo tomando a Kagome con el y saliendo a la superficie salio del lado del río donde estaba la piedra que se callo y corrió con Kagome en sus brazos afligido, ella no despertaba!
Pronto a lo lejos Inuyasha diviso una cabaña y comenzó a correr llegaron rápido en cuanto entraron Inuyasha dejo a Kagome en la cabaña y salio afuera y trajo leña rápidamente entro y busco con que encenderla pero no había nada, entonces busco en los bolsillos de Kagome y saco un encendedor que ella dejo en su bolsillo desde que hacia un momento llevaba cuando lo guardo después de encender una fogata para comer alrededor de ella cuando el mounstro los ataco…
Encendieron la fogata y aun así el frío no se le quitaba, quitaba sus ropas estaban empapadas el dejo solamente su hakama y ya que Inuyasha no acostumbraba usar un fondushi era lo único que traía puesto, el abrazo a Kagome y entonces ella tosiendo despertó…
Kagome: “I… Inuyasha…”
Inuyasha: “Kagome… Tienes que quitar tu ropa…”
Ella se sonrojo y se sentó, el no dejo de mirarla a los ojos…
Inuyasha: “No creas que soy como Miroku pero si no lo haces te vas a poner muy mal…”
Ella se volteo y quito su camisa poniéndose del lado opuesto al fuego de donde estaba Inuyasha y dándole la espalda… Ella seguía temblando pero no podía quitar nada mas frente a el…
Inuyasha: “Deberías de quitártelo también… deja tu falda…”
Kagome: “Tanto quieres que me desnude frente a ti? O que sabes como luce Kikyo desnuda y nos quieres comparar!”
Inuyasha sintió como sus palabras lastimaron su corazón el no amaba a Kikyo creyó que lo hizo pero fue porque estaba confundido cuando el le dijo a ella que le debía su vida a Kikyo estaba confundido se la debía muchísimo mas a Kagome y no se lo había dicho se lo había demostrado siempre cuidando de ella y nunca dejándola atrás desde ese día el no había vuelto a ver a Kikyo la había querido ver para decirle que no confiara en que tenia su ayuda pero recordó que Kikyo nunca confió en el realmente y que jamás lo haría así que decidió no tomarse la molestia de gastar su tiempo y también tener la probabilidad de que Kagome se pusiera muy triste o mal interpretara las cosas…
Inuyasha: “Jamás vi desnuda a Kikyo y no me interesa… Nunca te compararía con ella Kagome…”
Kagome: “Ya veo no soy lo suficientemente buena…”
Las palabras de Inuyasha la habían herido en lugar de darle aliento… “Solo me quieres ver para imaginar entonces…”
Inuyasha: “Porque piensas eso… Yo no… de ninguna manera haría tal cosa… Kagome… Kikyo jamás será ni siquiera la mitad de buena que tu…”
Kagome volteo a verlo cubriendo sus pechos aun protegidos de la vista de Inuyasha por su sostén… Ella no vio mentira en los ojos de Inuyasha… Ella solo vio… amor…
Inuyasha: “Jamás la quise ni siquiera la mitad de lo que te quise a ti… A ella nunca la ame a ti… a ti… No tienes idea de cuanto yo… te… te… te amo Kagome…”
Las lagrimas salieron de los ojos de Kagome derramándose por su frío y terso rostro de ella no podía creer que su precioso Hanyou le estaba diciendo que la amaba y viéndola a lo ojos, sin mentiras sin engaños… solo verdad y amor… ella se lanzo en sus brazos y lo abrazo, pudo sentir que su cuerpo estaba bastante frío sobre todo su espalada porque no estaba dando al fuego…
Inuyasha correspondió a su abrazo casi desesperado ‘por fin pude decirle esas palabras…’ El había venido guardando todo ese gran sentimiento de amor en lo mas profundo de su corazón hasta donde ella estaba ningún otro ser iba a tomar nunca su lugar había guardado silencio durante tanto tiempo pero ya no por fin se lo confeso… El se separo un poco de ella y tierna y lentamente se acerco a sus labios y los cepillo con ternura, ella correspondió a su beso, se abrazaron con mas fuerza tratando de que sus cuerpos calentaran unidos ya que el frío era insoportable, aquel beso tierno se fue tornando mas apasionado, mas dulce, mas lleno de amor… Ellos se recostaron e Inuyasha levanto el sostén de Kagome dejándole ver sus hermosos pechos, el los sostuvo con su mano estaban fríos la igual que muchas partes de su cuerpo, no eran muy grandes ni muy pequeños quedaban exactamente a la medida de su mano, ella se sonrojo cuando el hizo esto pero no se opuso a su toque, el entonces se arrodillo sobre ella teniéndola entre sus piernas el se hizo hacia abajo y tratando de sacarla de su falda, Kagome levando sus caderas y llevo sus manos a la parte de atrás de su falda soltando el botón que le sostenía entonces la empujo levemente hacia abajo, el la deslizo y saco de sus pies luego lentamente hizo lo mismo con sus bragas, ella se sonrojo mucho cuando el las quito y puso sus manos en su rostro jalándolo hacia ella porque se quedo mucho tiempo mirándola inmóvil sin decir nada, ella no podía ver sus ojos por los rebeldes mechones de cabellos que caían sobre su frente, el la beso con pasión ella le respondió con la misma intensidad luego el lamió sus labios pidiendo permiso para entrar en su boca y ella accedió deslizo despacio su lengua hasta el interior de su boca, saboreándola tan similar a su dulce olor, ella respondió a su toque llevando su lengua al encuentro de la de el, el se sorprendió al sentirla pero luego se calmo y la acaricio, era maravilloso, el se sentía en el cielo al percibirlo todo en conjunto, sus labios, su lengua, su cuerpo desnudo debajo de el, todo, su cuerpo ardía en el deseo y el no pudo mas, desato su hakama e iba a posicionarse cerca de su entrada un poco nervioso por se esta su primera vez aunque le consolaba el saber que también era la de ella, el sabia que debía ser especial, manso, lento, suave, amándose el uno al otro y eran sus planes hasta que Kagome se giro y lo hizo caer de espaldas en el suelo de madera de la cabaña, ella se posiciono sobre el y beso su cuello succionando a la vez dejando pequeñas marcas, ella se separo un poco de el y paso a quitar su hakama exponiendo toda su hermosa anatomía a sus ojos hambrientos de el, ella llevo sus manos a su miembro duro e hinchado, ella supo que esto le agradaría el se sorprendió por su ataque tan directo pero le encanto la sensación del delicado roce de sus dedos sobre un lugar tan sensible, en una ocasión sus garras tocaron ese lugar cuando el bañaba y fue tremendamente doloroso, el no volvió a prestarse mucha atención desde ese día temiendo volver a lastimarse por lo tanto pensó que seria realmente muy doloroso semejante acto con Kagome pero cuando ella lo toco fue solamente placer, nada de dolor, el se maravillo y no pudo evitar gemir con placer repetidas veces, ella amo escucharlo gemir su nombre acompañado de inmenso placer, ella subió a abrazarlo puesto que el frío era mucho, ellos se abrazaron durante un rato hasta que Inuyasha se posiciono de nuevo sobre ella y pidió que separara sus piernas ella asintió pero le detuvieron sus palabras…
Kagome: “Inuyasha… hiciste esto antes?”
Inuyasha: “No y tu…”
Kagome: “A ti es el único a quien amo…”
El le sonrió con ternura ante esta declaración y se acomodo para entrar en ella, un movimiento mas y pudo sentir su punta dentro de ella, Kagome se aferro con fuerza a su espalda, sintió dolor pero a medida que Inuyasha entro en ella también le acompaño un inmenso placer cuando el empujo lo mas que pudo y supo que no podía ir mas allá se apoyo en sus codo y le beso con suavidad, el paso un brazo por debajo de ella sujetando su cintura pero a la misma vez se mantuvo sosteniendo la mayor cantidad del peso de su cuerpo en sus codos no quería incomodarla, Kagome le beso con igual ternura y dulzura, ella se aferro mas fuertemente a el y después cuando ellos se miraron fijamente Inuyasha cerro los ojos y se comenzó a mover dentro de ella, bajo su cara hasta uno de sus oídos y llevo su boca hasta su cuello, la beso en ese lugar al igual que ella dejando marcas al succionar su tersa piel, el deslizo con delicadeza sus brazos detrás de su espalda para poder abrazarla, ellos estaba tan juntos que todo el frío desapareció en cuestión de segundos y el placer les inundo desencadenándose en un grito estrepitoso es inundado de placer y del nombre de su amante… Inuyasha giro y se acostó de lado mirándola, el no terminaba en ella, aun estaban unidos, entonces lentamente el salio de ella y le abrazo un poco mas cómodamente, ella se giro y su espalda termino apoyada en el pecho de Inuyasha, el enrolló sus brazos en ella que se quedo pronto dormida, el permaneció despierto un rato mas pero no fue mucho ya que pronto el sueño el derroto…
Kagome estaba embarazada Inuyasha se lo anuncio, ella le pidió ir lo mas pronto posible a su época para resolver el problema ella explico el problema que tendría con su madre y con sus estudios si aparecía con un niño de hecho el le acompaño y lo único que ella hizo fue tomar una pastilla y todo resuelto, el se sorprendió y ella compro algunas pastillas anticonceptivas para continuar haciendo el amor con Inuyasha antes de terminar sus estudios y ser ya mayor lo suficiente para casarse con el, ellos acecinaron finalmente a Naraku y el segundo día mas feliz en la vida de Kagome fue cuando Inuyasha le dijo a Kikyo que a quien el amaba era a Kagome y no a ella, claro que el día mas feliz de la vida de Kagome es cuando hizo el amor por primera vez con Inuyasha, ellos permanecieron juntos y el deseo que pidieron a la perla es de que Inuyasha pudiera cambiar de apariencia no de que se transformara de una vez, Inuyasha se sintió tan alagado cuando Kagome le pidió que cambiara su forma el siempre se conmovió por el hecho de que ella lo aceptara tal como era y así vivieron finalmente felices para siempre…
